ACHC | Revista Hospitalaria del sector salud

EN PORTADA
Compartir en facebook
Compartir en twitter
Compartir en linkedin
Compartir en whatsapp
Instituto de Evaluación Tecnológica en Salud (IETS): respaldo científico para la toma de decisiones en el sistema de salud
Adriana María Robayo- Directora ejecutiva del IETS

El Instituto de Evaluación Tecnológica en Salud (IETS), creado en septiembre de 2012 por el Ministerio de Salud y Protección Social, en cumplimiento de un mandato de la Ley 1438 de 2011, y en diez años de operación, se ha consolidado como un organismo que aporta respaldo científico para la toma de decisiones en el sistema de salud.

Para tal efecto, el IETS parte de articular las necesidades de la población del país y la evolución del sistema de salud; posibilita el diálogo entre la evidencia científica y la toma de decisiones en políticas de salud, y evalúa rigurosamente, desde lo científico, lo económico y lo social, las tecnologías sanitarias (cualquier intervención usada para promover la salud, para prevenir, diagnosticar o tratar enfermedades, para rehabilitar o atender) en los diferentes puntos de su ciclo de vida, con el fin de determinar si esa tecnología sanitaria es efectiva, costo-efectiva y segura.

Adriana María Robayo García, directora ejecutiva del IETS, explica que el Instituto cumple dos grandes funciones de ley desde su creación: hacer la evaluación de tecnologías en salud basada en evidencia científica y elaborar guías, protocolos, lineamientos y demás instrumentos para orientar la práctica clínica y el uso de esas tecnologías en salud. Dichas funciones fueron delegadas en el artículo 92 de la Ley 1438 de 2011, para ser desarrolladas de acuerdo con los contenidos del Plan de Beneficios en Salud, de forma tal que sus orientaciones fueran “un referente para la definición de planes de beneficios, para los conceptos técnicos de los Comités Científicos y la Junta Técnico-Científica, y para los prestadores de los servicios de salud”.

Por su parte, los objetivos específicos del IETS son los siguientes: evaluar las tecnologías en salud, considerando los aspectos de seguridad, eficacia, eficiencia, efectividad, utilidad e impacto económico; consultar evaluaciones de tecnologías con centros de evaluación acreditados nacional e internacionalmente que se subcontrataren para la evaluación de tecnologías médicas; articular con instancias u organismos afines la evaluación de tecnologías en salud en todas sus fases, teniendo en cuenta su impacto en la reducción de la morbilidad y mortalidad del país, y en el presupuesto asignado para la adopción de estas; diseñar estándares, protocolos y guías de atención en salud, basados en evidencia científica, que sirvan de referente para la prestación de los servicios de salud; y difundir las metodologías empleadas y la información producida.

Robayo García indica que luego vinieron otras normas que le asignaron nuevas funciones al IETS, como el Decreto 2562 de 2012, que lo convirtió en miembro de la Comisión Asesora de Beneficios, Costos, Tarifas y Condiciones de Operación del Aseguramiento en Salud. La Ley 1753 de 2015, que expidió el Plan Nacional de Desarrollo 2014-2018, estableció que el IETS debía hacer la evaluación técnica para la puerta de entrada: en su artículo 72 señala que “la evaluación que realice el IETS a los medicamentos y dispositivos médicos definidos por el Ministerio de Salud y Protección Social, y el precio que este ministerio determine con base en esa evaluación, serán requisitos para la expedición del correspondiente registro sanitario y/o su renovación por parte del Invima”.

 

Luego para dar cumplimiento a la Ley 1751 de 2015, Ley Estatutaria en Salud, se determinó que el IETS se encargaría de la Fase 2 o evaluación técnica de las exclusiones del Plan de Beneficios en Salud (PBS), que fuesen nominadas como tales. La Resolución 205 de 2019 le asignó al IETS la evaluación de aquellos servicios y tecnologías en salud que se van a financiar por Presupuestos Máximos. El Decreto 811 de 2021, en el parágrafo 3 de su artículo 2.8.11.5.3, determinó que el IETS, de acuerdo con sus funciones y competencias, establecerá las guías y protocolos de atención a pacientes con productos terminados de cannabis medicinal con fines médicos.

Durante la pandemia, en la Ley 2064 de 2020 se creó como parte del IETS el Consejo de Evaluación de las Reacciones Adversas a la Vacuna contra la COVID-19, para las vacunas suministradas por el Estado colombiano. Dicho Consejo evalúa la existencia o inexistencia de un nexo causal entre el evento adverso sufrido por un habitante del territorio nacional y la aplicación de la vacuna. El Consejo tiene al menos cinco consejeros expertos, quienes cuentan con el apoyo técnico de un grupo científico dedicado por el IETS para la evaluación de esos eventos adversos.

En el Decreto 1099 de 2022 se establece que el IETS es invitado permanente en la Comisión Intersectorial para el desarrollo y producción de tecnologías estratégicas en salud en Colombia. Y el IETS adelanta otras evaluaciones y acciones, en especial para el Ministerio de Salud, Secretarías de Salud y cooperación internacional que presta beneficio en Colombia, como lo manifiesta García Robayo.

Una década en continuo desarrollo de capacidades

En 2022, la directora afirmó que el IETS cumplía “diez años de promoción al acceso equitativo, eficiente y sostenible a las tecnologías sanitarias en Colombia, Latinoamérica y El Caribe”; además, especificó: “Han sido diez años de aprendizaje continuo para adaptar y desarrollar métodos científicos que ayudan a definir planes de beneficios y uso de tecnologías. Diez años generando conocimiento con más de 1.000 productos desde la síntesis de evidencia, la economía, la analítica, la actuaría, los métodos cualitativos y la investigación social en salud. Diez años facilitando oportunidades para el ecosistema de salud y forjando redes nacionales e internacionales”.

Señaló además que en 2022, un año caracterizado por grandes retos para el sector salud, en un contexto de incertidumbre y reformas, el IETS permaneció a la vanguardia “brindando información técnica, rigurosa y transparente, y articulando a los diversos actores para responder a las necesidades de los colombianos y colombianas. Desarrollamos la metodología para la clasificación de valor o beneficio terapéutico de nuevos medicamentos que ingresarán al sistema de salud colombiano; construimos herramientas técnicas para mejorar el tratamiento de las enfermedades priorizadas en el país; presentamos la propuesta de cálculo actuarial de la UPC para el régimen subsidiado; formamos pacientes y profesionales de la salud en evaluación de tecnologías sanitarias; desarrollamos el estudio sobre la seguridad y efectividad para el uso médico del cannabis y sus derivados, entre otras acciones que impactaron positivamente al país y la región”.

García Robayo sostiene que el cumplimiento de la misión del IETS, en sus diez años de actividades, “le ha permitido al sistema de salud colombiano ser sostenible, a las autoridades sanitarias tomar decisiones basadas en la mejor evidencia científica, a los profesionales de la salud mejorar la atención que prestan a sus pacientes con la estandarización de la práctica clínica, y a la población favorecer el autocuidado, prevenir y entender sus diagnósticos y tratamientos”.

La esencia del trabajo del IETS

Desde el Instituto se advierte que para plantear innovaciones o mejoras en salud, lo primero es reconocer la persona en su individualidad y la forma como participa en su entorno. Por ello, en estos diez años, “el IETS ha implementado una estrategia exploradora en la búsqueda, valoración y generación de recomendaciones de la evidencia a partir de los aspectos sociales, ambientales, financieros y clínicos de las poblaciones, permitiéndose ampliar las alternativas para la mejora de la experiencia del paciente con las tecnologías sanitarias en contextos determinados” (1).

En el Anuario 2022 del IETS, se explica que “la evaluación de tecnologías sanitarias (ETES, también llamada ETESA) es un proceso multidisciplinar que usa métodos explícitos para determinar el valor de una tecnología sanitaria, en los diferentes puntos de su ciclo de vida, con el propósito de incidir en los procesos de toma de decisiones informadas y así promover un sistema sanitario equitativo, eficiente y de alta calidad. Las ETES pueden aplicarse en diferentes puntos del ciclo de vida de una tecnología sanitaria, es decir, antes de la comercialización, durante la aprobación del mercado, posterior a la comercialización, hasta la desinversión de la tecnología, como muestra el gráfico 1”.

En el Anuario 2022 se explica que, “desde su creación, el IETS ha buscado ser referente en la respuesta integral a las necesidades evaluativas relacionadas con la salud de la población (como se muestra en el gráfico 2) y contribuir a la eficiencia, equidad y cohesión del SGSSS”.

Alta calidad en la investigación y liderazgo en Latinoamérica

El IETS es experto en el desarrollo de investigaciones con calidad reconocida: en diez años ha desarrollado más de 900 productos, como 204 espacios participativos con expertos, pacientes y tomadores de decisión; 202 estudios de efectividad y seguridad de tecnologías sanitarias; 183 análisis de impacto presupuestal; 55 revisiones sistemáticas de literatura; 32 evaluaciones de tecnologías sanitarias y 30 evaluaciones económicas en salud.

La directora del Instituto señala: “Somos un Grupo de Investigación ‘A’ de Minciencias, somos uno de los 20 o 21 institutos públicos de investigación en el país de todas las áreas de conocimiento, o sea, nacionales; publicamos artículos científicos; estamos a la vanguardia en métodos; tenemos intercambio con toda la región y somos de los grupos líderes en la región en evaluación de tecnologías, en la práctica los que vamos más adelante y, en forma institucional, somos Brasil y nosotros por Colombia; nos hemos constituido en referentes de Latinoamérica”.

García Robayo indica que “los métodos de investigación del IETS se adaptan y se realizan para Colombia, pero siguen las mejores prácticas del mundo en estos temas, tanto en innovación de tecnologías como en epidemiología y en economía de la salud. Además, tenemos un grupo que trabaja temas de participación, de investigación cualitativa y salud pública, que nos permite con los otros dos grupos (de evidencia y de economía de la salud y analítica), entregar respuestas muy bien hechas sobre medida para los requerimientos que tiene tanto el Ministerio como los otros contratantes. Y tenemos unas funciones sociales, funciones públicas múltiples, y tratamos de hacer lo mejor para el país, y obviamente podemos estar muy involucrados con lo que venga en APS (Atención Primaria en Salud), tanto evaluando equipos como realizando guías, y podemos seguir trabajando también con la gente de los hospitales y las clínicas en un momento dado”.

La directiva agrega que actualmente el IETS trabaja con sociedades científicas, con pacientes, y trabaja muy de la mano con los tomadores de decisiones en el sistema de salud, especialmente el Ministerio del ramo, Secretarías de Salud y entidades de cooperación internacional. Asimismo, advierte que, por ser el IETS una corporación mixta, el Instituto se cuida mucho de evitar conflictos de interés y no contrata donde potencialmente puedan surgir esos conflictos.

Para el desarrollo de los estudios, el IETS cuenta con tres jefaturas técnicas: i) Síntesis de Evidencia y Gestión de Tecnologías Sanitarias, ii) Estudios Analíticos, Económicos y Actuariales en Salud, iii) Métodos Cualitativos e Investigación Social.

Relacionamiento estratégico y participación del IETS en redes internacionales

Desde el IETS se han generado y fortalecido relaciones con diecisiete países de América, Europa y Asia, que permitieron desarrollar proyectos y actividades académicas de generación de conocimiento. También se fortaleció el relacionamiento con organizaciones internacionales como el Banco Mundial, el Fondo Mundial contra el VIH y la Organización Panamericana de la Salud, entre otros.

La directora del IETS señala que el referente mundial en evaluación de tecnologías sanitarias y elaboración de guías clínicas basadas en evidencia, es el NICE (National Institute for Health and Care Excellence – Instituto Nacional para la Calidad de la Salud y de la Asistencia), organismo del Reino Unido, el más grande del mundo de su tipo. Además, las agencias de evaluación de tecnologías en salud oficiales y que trabajan con los gobiernos están agrupadas en INAHTA.

Entendiendo que la conformación de redes tiene como objetivo compartir y aprender de las experiencias e incrementar elementos que aporten en la construcción de evidencia (científica y del mundo real) de manera bilateral, multilateral, generando puntos de encuentro y de oportunidades para investigadores, profesionales de la salud, centros de investigación académicos y todos los participantes del ecosistema de salud, el IETS participa en escenarios de la red internacional, regional y está en proceso de consolidar la red nacional y regional para Colombia en esta materia.

Desde 2019, el IETS es miembro activo y representante de Colombia en las siguientes redes internacionales: INAHTA (Red Internacional de Agencias de Evaluación de Tecnologías Sanitarias – International Network of Agencies for Health Technology Assessment), RedETSA (Red de Evaluación de Tecnologías Sanitarias de las Américas), EVIPNet (Red de Políticas Informadas por la Evidencia, red patrocinada por la OMS), Policy Forum Latinoamerican – HTAI (Foro de Políticas de Evaluación de Tecnologías Sanitarias -Policy Forum- es una actividad organizada por HTAi), HTAi (Sociedad Internacional de Evaluación de Tecnologías Sanitarias- Health Technology Assessment International), y Share-Net International (Plataforma de Conocimiento en Salud Sexual y Reproductiva y Derechos Sexuales y Reproductivos).

El apoyo del IETS a la atención de la pandemia en Colombia

La directora del IETS destaca que, durante la pandemia por COVID-19, el Instituto asumió muchas tareas en varios frentes de acción para soportar la toma de decisiones a nivel nacional y territorial. Se trabajó desde la búsqueda y análisis de evidencia científica que estandarizara la práctica clínica en atención, diagnóstico y manejo de la infección por COVID-19, hasta el asesoramiento externo y orientación a Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (IPS) y a profesionales de la salud.

Se trabajó en cada etapa de la pandemia en el país, consiguiendo desarrollar en tiempo récord diferentes productos clave para el tratamiento, consultas e identificación de datos clave sobre la enfermedad. Se desarrolló el Geovisor de vulnerabilidad de la COVID-19 en Colombia, con el cual se pudo visualizar gráfica y dinámicamente capas de información geográfica relacionados con la pandemia. También se hizo la revisión rápida de vacunas y el Consenso colombiano de atención, diagnóstico y manejo de la infección por SARS-CoV-2/COVID-19 en establecimientos de atención de la salud, contribuyendo así a la toma de decisiones de salud en el país.

En 2020, el IETS elaboró un modelo econométrico, reproduciendo el modelo de Michael Kremer (Premio Nobel de Economía de 2019), para tratar de establecer el tamaño óptimo del portafolio de vacunas que Colombia debía comprar y el momento de comprarlas. Y en el Plan Nacional de Vacunación, el IETS operó como un ente asesor con el suministro de estudios técnicos y revisiones sistemáticas de la literatura acerca de la efectividad y seguridad de las vacunas, previos a la decisión de los tipos de vacunas que debían comprarse.

La Resolución 2272 de 2020 determinó que el IETS hiciera parte de la Instancia de Coordinación y Asesoría para el acceso a vacunas seguras y eficaces contra el coronavirus SARS-CoV-2/COVID-19 y la directora del IETS asistió como invitada al Comité Asesor de Vacunas, creado por la Resolución 1270 de 2020, para evaluar la parte epidemiológica de la COVID-19.

Asimismo, el Instituto también fue Asesor Metodológico del Consenso Colombiano SARS-CoV-2/COVID-19, en el cual participaron más de 100 entidades, entre hospitales, universidades, sociedades científicas, en un esfuerzo colaborativo para el manejo clínico de los pacientes.

En postpandemia: seguir evaluando innovación y garantizar flujo de recursos para investigación

La directora del IETS afirma que el desafío más importante del Instituto actualmente, de cara a la postpandemia, es continuar el trabajo de evaluación de las tecnologías de innovación en salud que entran al país: “El desafío es tener más posibilidades de evaluación: seguir evaluando todo lo que entra por innovación al país, para tratar de determinar si se debe pagar o no con recursos públicos de forma más amplia y generalizada. Otro reto grande es seguir haciendo guías, protocolos y lineamientos, y actualizar la guía de guías, tema que le sirva a los diferentes prestadores, hospitales y clínicas y, de alguna forma, poder dar método para todo lo que hay que evaluar en innovación: está llegando tecnología digital, pruebas genéticas, medicina personalizada, y aún en el mundo, no solo en Colombia, hay mucha duda acerca de cómo se debe evaluar; entonces, tenemos que seguir desarrollando métodos para evaluar esa tecnología que está llegando al país”.

Y en el propósito de fortalecer su misión en el sistema de salud, García Robayo señala que la necesidad más urgente para sostener un flujo permanente de trabajo es disponer de recursos suficientes para cumplir las funciones del Instituto: “Tenemos gente muy buena, pero para funcionar todavía dependemos de las fechas en que se definen los contratos con el Ministerio de Salud. Lo que queremos y lo que está propuesto por el mismo Ministerio y Planeación Nacional es que se cambie un poco o se ajuste la naturaleza jurídica del IETS, para que se denomine adscrito o vinculado o como se quiera, pero que al final haya un flujo de recursos y un trabajo permanente del IETS, sin depender tanto de la contratación. Que estemos desarrollando nuestra labor durante todo el año, en forma permanente y no episódica según contratos. Eso sería fundamental”.

El futuro: ampliar grupos de trabajo que desarrollen más metodologías de evaluación en salud

La visión del IETS apunta a ser reconocido en el país como el referente técnico y líder de la Red de ETES (Evaluación de Tecnologías en Salud) en Colombia, facilitando la articulación armónica y efectiva para la generación de evidencia robusta y confiable, que contribuya en el impacto social y la sostenibilidad financiera del sector salud, con un talento humano ético altamente calificado, satisfecho y comprometido.

Precisamente, para fortalecer la misión del Instituto en el mediano y en el largo plazo, la directora recomienda seguir ampliando el grupo de trabajo con profesionales muy capacitados, “para seguir desarrollando métodos de evaluación de tecnologías sanitarias convenientes para el país, sean tecnologías de hospitales de cuarto nivel o metodologías para evaluar tecnologías en la Atención Primaria que quiere reforzar el país. En la medida en que tengamos gente que desarrolle métodos para evaluar tecnología, el país puede estar seguro de que lo que se decida incluir, lo que se decida pagar, realmente vale la pena y que se tomó la mejor decisión, que no había una mejor alternativa. Entonces seguir teniendo un grupo dedicado porque esto no lo hacen máquinas, sino seres humanos que son técnicos y estamos muy dedicados a esto, con un flujo de trabajo permanente, con recursos suficientes para hacer este tipo de estudios y desarrollar metodología”.

Por último, García Robayo concluye que el trabajo del IETS debería servir para todos los actores del sector salud: “A un nivel macro, [como el] caso [del] Ministerio de Salud y otros ministerios, y cooperación internacional; a un nivel meso, a hospitales públicos o privados, asociaciones y gremios de médicos y otros profesionales de la salud; y a nivel micro, cuando se habla de un paciente individual o un médico individual. De alguna forma, el Instituto está al servicio de todos los actores, en los diferentes niveles macro, micro y meso en salud en el país. O sea, el Instituto tiene que tener los mismos métodos sin importar quién contrate ni de dónde vengan los fondos, porque lo que hacemos es robusto, es sistemático, es reproducible, es trazable, y el resultado siempre tendría que dar lo mismo sin importar quién encarga el estudio; no es que el Instituto sea un árbitro. Pero si un agente neutro que entrega resultados técnicos, y esos resultados técnicos a la luz, ¿de quién sea el revisor se tienen que interpretar para tomar la mejor decisión con la evidencia que brindemos”.

 

Bibliografía
López A, Ramírez G e Iglesias A. (2004). Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos: una muerte anunciada. NOVA, vol.2 No. 2 Enero- diciembre de 2004:1-108 DOI: https://doi.org/10.22490/24629448.11
– Gutiérrez-Ibarluzea I (2022). Modelando los planes de beneficios. Obsolescencia, desinversión y escaneo del horizonte. [Diapositiva de PowerPoint]. I Simposio Internacional de Evaluación de
Tecnologías en Salud: 10 años del IETS. 2022, Oct 27.
– Gutiérrez-Ibarluzea I, Chiumente M, Dauben HP. (2017) The Life Cycle of Health Technologies. Challenges and Ways Forward. Front Pharmacol. 2017 Jan 24; 8:14. doi: 10.3389/fphar.2017.00014.
Instituto de Evaluación de Tecnológica en Salud – IETS (2023). Anuario 2022. 10 años: Una década en continuo desarrollo de capacidades incrementando la participación, inclusión y sostenibilidad en favor de la salud de los colombianos.